viernes, 8 de agosto de 2014

CORREDORES SOLIDARIOS




Dar un paso al frente en beneficio de los demás no siempre es fácil. Desde luego no es algo que haga todo el mundo. Dedicar un poco del tiempo libre al margen de las obligaciones profesionales o familiares para entregárselo a los demás no siempre resulta fácil. Ni cómodo.
En el mundo del deporte en general y en el de las carreras en particular es cada vez más habitual encontrar iniciativas en las que gente saludable y deportiva se pone en acción para recaudar fondos o promover actuaciones solidarias.
Y “ponerse en acción” es una manera muy genérica de decir lo que son capaces de hacer algunas personas por los demás.
Hace no mucho tiempo estuve en un desayuno solidario promovido por José Miguel y Pablo, ambos corredores de montaña pero más que eso, multideportistas y aún por encima de eso, personas con una fuerte inquietud social. Ambos están enfrascados en la realización de una prueba de 712 km, la TRANSÁVILA  (más información en el enlace) en la que van a combinar la carrera a pie, la bicicleta de carretera y la de montaña con el fin de recaudar fondos para la Asociación de Lucha contra el Cáncer y para promover las donaciones de médula espinal. 712 km seguidos en un fin de semana. Es la distancia en línea recta que hay entre Bilbao y Almería. Por ejemplo. Vamos, es cruzar la península de lado a lado.
Víctor es un triatleta abulense que va a realizar 15 maratones en días consecutivos para recaudar fondos para la ASPACE. Su proyecto se llama MURALLA SOLIDARIA y podéis ampliar la información en este enlace. 15 maratones en 15 días son 633 kilómetros corriendo. La suma de los kilómetros que yo llevo en los últimos 90 días.

¿Qué les mueve a hacerlo? Me atrevo a imaginarlo.
Se trata de cumplir con un reto personal. Pero un reto que tiene una finalidad, más allá de probarse a sí mismos que son capaces de superarlo.
Las ganas de ayudar.
Las ganas de realizar un esfuerzo (un “macroesfuerzo”) en beneficio de aquellos a los que la vida no les ha dado la oportunidad de disfrutar de la naturaleza y del deporte, como nos la ha dado a nosotros.
La intención de mover las conciencias de todos los que nos refugiamos en nuestras obligaciones y en nuestros problemas para justificar que no tenemos tiempo para dedicar unas horas al beneficio común.
El propósito de poner de manifiesto que esta sociedad en la que vivimos la componemos todos y cada uno de nosotros y que todos podemos hacer algo más que echar la culpa a los políticos que nos gobiernan.
Incluso, tal vez, denunciar que los fondos públicos que administran esos políticos están para satisfacer las necesidades de los ciudadanos, de todos los ciudadanos, en especial de los más desfavorecidos.


Ellos son un ejemplo. Hay otros muchos. Aprendamos y colaboremos.

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